Los portugueses acuden a las urnas en unas reñidas elecciones generales
Un miembro de una comisión electoral local ayuda a un votante mientras la gente hace cola para votar, en un colegio electoral durante las elecciones generales en Lisboa, Portugal. 10 de marzo de 2024. REUTERS/Violeta Santos Moura
Por David Latona y Catarina Demony
LISBOA/ESPINHO, 10 mar (Reuters) – Los portugueses acudían el domingo a las urnas para elegir entre un gobierno de centro-derecha o mantener en el poder al del centro-izquierda, aunque ninguno de los dos parece tener posibilidades de alcanzar una mayoría absoluta.
El partido de extrema derecha Chega ha ido ganando peso y podría desempeñar un papel decisivo en las negociaciones postelectorales.
Entre los temas que dominan la campaña en el país más pobre de Europa occidental figuran la crisis de la vivienda, los bajos salarios, la deficiente atención sanitaria y la corrupción, que muchos consideran endémica de los partidos mayoritarios.
Los colegios electorales abrieron a las 8 de la mañana (0800 GMT) y cierran a las 7 de la tarde en Portugal continental y una hora más tarde en el archipiélago de las Azores.
La participación a las 13.00 horas era del 25,21%, ligeramente superior al 23,27% registrado a la misma hora en las anteriores elecciones de enero de 2022, según el Ministerio del Interior. Los resultados se esperan hacia medianoche.
Las elecciones, desencadenadas por la dimisión del primer ministro socialista Antonio Costa en medio de una investigación por corrupción hace cuatro meses, enfrentan a los dos partidos centristas -el Partido Socialista (PS) y el Partido Socialdemócrata (PSD)- que se han alternado en el poder desde el final de una dictadura fascista hace cinco décadas.
“Espero que la vida sea mejor de lo que es ahora”, dijo a Reuters Diamantino Vieira, de 86 años, mientras esperaba para votar en un colegio electoral de la ciudad norteña de Espinho, donde también votó Luis Montenegro, que lidera la Alianza Democrática (AD) de partidos de derecha.
La AD, formada por el PSD de Montenegro y dos partidos conservadores más pequeños, lidera la mayoría de los sondeos de opinión, pero podría tener dificultades para gobernar sin el apoyo de Chega. Montenegro ha descartado hasta ahora cualquier acuerdo con los populistas radicales, que quieren un papel en el gobierno.
También en Espinho, Ana Maria, de 73 años, animó a los demás a votar para quejarse del estado del país, añadiendo: “La gente que gobierna (…) sólo mira sus bolsillos y sólo se preocupa de sí misma. Son unos inútiles”.
Eduardo Velosa, librero de 35 años en Lisboa, dijo que las elecciones podrían marcar el inicio de un nuevo ciclo político. “Todo el mundo debería votar porque tenemos muchos problemas”, añadió.
El gobernante PS, liderado por Pedro Nuno Santos tras la dimisión de Costa, podría intentar una repetición de sus viejas alianzas con el Bloque de Izquierda y los comunistas que le permitieron gobernar entre 2015 y 2019, si la izquierda combinada consigue más de 115 escaños en el Parlamento de 230 escaños.
Las encuestas sugieren que el apoyo al mensaje antisistema de Chega, su promesa de barrer la corrupción y su hostilidad a lo que considera una inmigración “excesiva”, se ha duplicado aproximadamente desde las elecciones de 2022, aunque se mantiene en tercer lugar.
El viernes, el presidente conservador Marcelo Rebelo de Sousa declaró al diario Expresso que haría todo lo posible para impedir que Chega llegue al poder, lo que suscitó críticas, ya que el Jefe del Estado tiene el mandato de permanecer neutral.
El politólogo Antonio Costa Pinto, de la Universidad de Lisboa, afirmó que Portugal “ha entrado en la dinámica de muchas democracias europeas”, en las que la centro-derecha se ve cuestionada por tener un partido radical a su derecha consolidado en tercer lugar.
Un posible gobierno en minoría de AD, incluso apoyado por la más pequeña Iniciativa Liberal de centro-derecha, necesitaría probablemente los votos de Chega para aprobar leyes, lo que lo haría relativamente frágil, ya que Chega podría derrocarlo en cualquier momento.
Sin embargo, “una victoria del PS con mayoría absoluta de la derecha en el Parlamento sería el escenario más complejo e inestable”, añadió Costa Pinto.
Más de 10 millones de ciudadanos tienen derecho a voto.
(Reporte de David Latona, Catarina Demony y Sergio Goncalves; Editado en Español por Ricardo Figueroa)
